Además de levantar barricadas, se instalo un lienzo y se dejaron panfletos, donde se deja en claro que NI LA MUERTE NI LA CARCEL detendrá el camino hacia la reconstrucción nacional mapuche y recuperar su independencia.
También se manifesto “todo el apoyo a las comunidades mapuche en conflicto que llevan adelante la digna recuperación del territorio ancestral, y, repudiar la violencia policial del estado chileno que a toda costa busca detener la lucha mapuche para proteger los intereses capitalistas que invaden el Wallmapu.
Por Alex Lemun, Matias Catrileo, Jaime Mendoza Collío y tantos otros asesinados por el estado chileno
Sobre la guerra en wallmapu
La violencia represiva del Estado en la Araucanía no es un hecho anómalo, sino que una cara visible de la violencia sistemática que el capitalismo pone en marcha para poder existir y reproducirse normalmente. Es la misma violencia que se empezó a expresar hace 5 siglos en Europa como expropiación de los campos y encarcelamiento masivo de los ex-campesinos, y es la misma que mata a diario 30.000 personas, en su mayoría niños, por hambre y enfermedades curables.
El enfrentamiento contra las fuerzas que imponen el orden capitalista no es sólo un conflicto entre “pueblos indígenas” y empresarios particulares, sino que es parte de la resistencia permanente de los seres humanos contra la imposición violenta de las relaciones sociales capitalistas, que en estos territorios se ha expresado sin parar desde hace ya 500 años, cuando los compañeros y compañeras mapuche decidieron dar la pelea contra el invasor, que los puso a trabajar por la fuerza en aras de acumular oro (y después de eso, otras formas de valor y de dinero).
La violencia de quienes se les ha expropiado los medios para subsistir es legitima para atacar los espacios donde mas claramente podemos encontrar la ocurrencia de la acumulacion de capital. Intervenir el orden que nos somete a cumplir un rol programado por cada industria del capital es de por si una accion que despliega negativamente una fuerza que agriete las representaciones del capital. Dichas acciones hemos de comprenderlas y analizarlas de un modo comunista y anarquico (en anarquia), extrayendo lo que consideremos tal de las mismas. No solo para evitar que se cristalize en la particular "lucha mapuche", sino para la lucha del proletariado contra el capital. "Alimentarnos" de la lucha en Wallmapu es necesario para esbozar todo el contenido negativo que hay en la afirmacion constante del capitalismo como monologo que se autojustifica cotidianamente. Lo que reflexionemos de la actividad total de la lucha en Wallmapu es una integracion para la guerra social en general, que solo ES cuando resulta una practica especifica que al mismo tiempo se acomoda a nuestro contexto y vuelve sobre si misma para tornarse mas rigura contra nuestros enemigos de clase, viendo sus errores y aciertos ademas de la reaccion del Estado/Capital.
Para quienes nos consideramos anticapitalistas, la autonomía mapuche es esencial al momento de representar una lucha que expulsa la lógica mercantil de territorios que en su reclamo va integrada además la comunalidad de los mismos. No es solamente la mantención de una identidad y una cultura, sino que también un rechazo a la economía que ve en las necesidades y las vidas un modo de generar más ganancias. Claro esta que podemos tener diferencias con las cosmovisiones respecto a ciertas cuestiones mas "micro", pero lo que nos une ha de ser mas fuerte que lo que nos divide. De ahi su importancia.
Ya basta de utopías "positivas", de esperar el futuro. Función de la utopía negativa: iluminar el sector de lo que pretende pasar piola y merece ser destruido.
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