viernes, marzo 09, 2007

El Famatina no se toca: contra la megaminería enLa Rioja


La Cámara de Diputados sancionó la ley que prohíbe la minería a cielo abierto. En una sesión con muchas expectativas, la Legislatura provincial de La Rioja sancionó una ley que prohíbe la explotación cielo abierto. Como así también una ley que dispone la realización de una consulta popular en los departamentos Chilecito y Famatina.
Con una sesión de casi tres horas de duración, la Legislatura provincial votó dos leyes referidas a la explotación minera. La primera es que La prohibición de la minería a cielo abierto con uso de cianuro. La segunda trata de la realización de una Consulta popular en los departamentos chilecito y Famatina para que la ciudadanía de a conocer su opinó ya sea favorable o desfavorable. Asimismo se creo una comisión, que tendrá a su cargo la investigación de las presuntas irregularidades en el contrato con la empresa minera Barrick Gold.
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En su meduloso y fundamentado estudio “El Impacto Social y la Minería en La Rioja”, el Dr. Mario Desio de la Vega, sobre la base de los libros escritos por Armando Bazán, Juan Bialet Massé, Alfredo Palacios y Julio González, de la Carta Pastoral del obispo riojano Ferreira Reinafé y de su larga y eficaz labor como médico e investigador, concluye: “Parece ser que la minería en La Rioja, hasta la fecha, fue la historia de mentiras y fracasos.”
Nuestros mayores mineros en el Famatina fueron tratados como esclavos y su salud, afectada por accidentes (socavones en grandes altitudes y temperaturas muy bajas) y un ambiente insalubre (sulfuros), era cuidada en el hospital público sin que mediara el más mínimo aporte de la empresa. El Estado invirtió cinco millones de pesos fuertes a principios del Siglo XX en una obra como el Cable Carril - hoy un “monstruo muerto” – para que los ingleses se llevaran, entre otros minerales, el oro del Famatina. Después, todos lo vemos y lo sabemos, en la región quedaron sólo ruinas, desolación, residuos basura y pobreza.
Nuestros gobernantes quieren, un siglo después, repetir la historia. Pero los ciudadanos decimos ¡NO! a la mina a cielo abierto con procesos químicos y ¡SI! a la vida y al agua porque “a su paso fugitivo y penetrante se reanima la floresta: / surge el brote, triunfa el germen y revientan los capullos” (Alberto Gabriel Ocampo).
El Dr. Raúl A. Montenegro expresa: “Las actividades mega-mineras del Proyecto Famatina–Barrick Gold son extremadamente peligrosas para la salud de las personas, los ecosistemas donde se asientan y la estabilidad ambiental a largo plazo.” Los Concejos Deliberantes de Chilecito y Famatina, sancionaron sendas ordenanzas oponiéndose a las explotaciones mineras a cielo abierto en las que se utilicen procesos de extracción por lixiviación con cianuro.
Los ciudadanos nos oponemos por: 1) La ley provincial de minas sancionada en 1987 privilegia a las empresas y perjudica el patrimonio de todos ya que terminaremos pagándoles para que se lleven 64 especies minerales (en el siglo pasado eran 9); 2) Esta ley crea Yacimientos Mineros Riojanos (YAMIRI) que comienza siendo una Sociedad de Economía Mixta (SEM), Estado y privados. De entrada se apropia de 60 ricas minas. Luego pasa a ser una Sociedad Anónima (SA), siendo sus accionistas mayoritarios privados Carlos Saul Menem, Angel Maza y sus allegados (Ver el libro “La Carpa de Ali Baba”, escrito por los integrantes del Grupo de los Ocho y publicaciones periodísticas de la década del 90); 3) Nuestro Famatina, que sería agredido por explosiones fabulosas y movimientos de tierras y rocas faraónicos, dejaría de ser el tanque de agua inagotable, de capacidad infinita, que siempre fue y es todavía; 4) La contaminación del agua por un cóctel de químicos y de cianuro afectaría por cien años los valles del Bermejo, Famatina-Antinaco, hasta Capilla del Monte, y la costa del Velasco y el dique que provee de agua potable a la capital riojana; 5) las actividades agrícola-ganaderas y sus industrias derivadas desaparecerían como consecuencia de la casi nula cantidad de agua que, además, estaría envenenada y 6) unos pocos llenarían sus bolsillos con los recursos mineros que son patrimonio de todos y que NO SON RENOVABLES. Y después, como hace un siglo, en la región quedarían sólo ruinas, desolación, residuos basura y pobreza. Y EL AGUA ENVENENADA. No permitiremos que suceda en La Rioja lo que ya está sucediendo en Catamarca, San Juan y Esquel.

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